En el cuerpo tenemos puntos reflejos de diferentes partes del mismo.
La reflexología es una técnica de origen oriental de la que hay referencias de hace más de 4000 años. Si nos remontamos a la historia más reciente, el Dr. William Fitzgerald observó cerca del año 1913, que podía realizar operaciones sin el uso de anestésicos realizando presiones en diferentes zonas del cuerpo. Desarrolló entonces la teoría de que el cuerpo es recorrido por líneas energéticas, comparables a los meridianos de la acupuntura.
El cuerpo humano está lleno de terminaciones nerviosas, conectadas entre sí, y conociendo estos puntos, lo que hacemos es activar vías serotoninérgicas, adrenérgicas... de forma que podemos reestablecer terrenos debilitados. Facilitando la curación de trastornos y dificultando las recaídas.
Lo más habitual es haber oído hablar de la reflexología podal. Sin embargo, también existe la reflexología en manos, tejido conjuntivo, de columna, facial...
Existen diferentes corrientes en la reflexología. La tibetana distingue entre zonas a tratar: órganos, vísceras, huesos, sistema nervioso, glándulas... de forma que la presión de trabajo para cada uno de ellos es diferente. Diferencia también la forma de trabajar en dolencias crónicas y agudas. Pero todas las formas de reflexología son válidas.
Masajearemos las zonas a tratar y utilizaremos aceites esenciales para potenciar la efectividad del tratamiento.
INDICACIONES
Esta técnica libera las tensiones más simples mejorando el caudal circulatorio, energético y nervioso activando y/o sedando el organismo (armonizándolo) independientemente del problema que sea por lo que podemos apuntar que sus principales indicaciones son:
- Liberación de la energía bloqueada y mejor equilibrio energético en el conjunto del organismo.
- Disolución de toxinas y sedimentos en el punto de origen del bloqueo.
- Percepción de cristales ácidos y/o gravilla a la presión y su eliminación.
- Mejora de la circulación sanguínea.
- Normalización orgánica y glandular.
- Relajación física y mental.
- Distribución del agua y las sales por los tejidos (debido a la actualización y mejora del riego sanguíneo).
EFECTOS DURANTE Y DESPUÉS DE UNA SESIÓN DE REFLEXOLOGÍA
Es habitual encontrar cansancio al día siguiente debido a la eliminación de toxinas disueltas, que hacen que el organismo trabaje con más esfuerzo para desecharlas provocando el cansancio y su posterior eliminación a través de los órganos emuntorios (mayor diuresis, sudoración, olor, consistencia de las heces, respiración fatigosa, etc.)
- Espasmos, bien al dormir o en la camilla.
- Sueño, amodorramiento, falta de reflejos.
- Catarros, salidas de mucosas.
- Reacción nerviosa, llanto, risa, calor, frío, escalofríos.
Este tipo de reacciones indican una liberación de las tensiones que provocan el trastorno.
CONTRAINDICACIONES
Más que contraindicaciones, el masaje reflexológico tiene precauciones, como son:
- Adolescentes: no se trabaja el tejido glandular.
- Zonas de trombosis: no se trata el trombo ni su zona refleja hasta que haya desaparecido el trombo.
- Zonas con cáncer: no se trabajan. En casos de leucemia o cáncer de huesos no se trabaja nada.
- Los restos medicamentosos se activan con la reflexología, hay que esperar a que se eliminen totalmente, primero ir a un naturista o ayurveda para limpiar. No se puede tratar si ha tomado quimioterapia, radioterapia o corticoides.
- Fiebre: Si la fiebre es baja se puede hacer reflexología, pero al activar la respuesta del cuerpo es posible que suba la fiebre. Es habitual encontrar cansancio al día siguiente debido a la eliminación de toxinas disueltas, que hacen que el organismo trabaje con más esfuerzo para desecharlas provocando el cansancio y su posterior eliminación a través de los órganos emuntorios (mayor diuresis, sudoración, olor, consistencia de las heces, respiración fatigosa, etc.)